El Betis conquista el Calderón

El Betis, que tiene acostumbrado a los suyos a lo imposible, hizo en el Calderón una más de las suyas. El conjunto verdiblanco comenzó ganando cuatro partidos consecutivos que le hicieron ser líder, pero luego sólo fue capaz de sumar un punto de 30 posibles. Lo peor del calendario estaba por llegar, después de perder dos partidos en el descuento ante Real Sociedad y Osasuna. Pero apareció la parte positiva de esta entidad centenaria. Dos victorias consecutivas, seis de seis, ante Valencia y Atlético de Madrid, dos equipos que, teóricamente, deben luchar por la Champions League. Lo hizo, cómo no, con sufrimiento y con auténtico asedio de los locales, pero la victoria en la capital le sirve al Betis para coger aire y, sobre todo, para pasar unas Navidades tranquilas.



Tras la victoria in extremis ante el Valencia y la mala sensación que dio el equipo en Córdoba, Mel decidió cambiar de sistema ante el Atlético de Madrid y optó por volver al 4-3-3. Dejó en el banquillo a Roque Santa Cruz y decidió que Cañas ayudara a tener más presencia en el centro del campo. De poco le sirvió al conjunto verdiblanco, que nada más comenzar el partido ya pudo ponerse por detrás en el marcador. Falcao en dos ocasiones pudo adelantar a los colchoneros, pero erró en ambas y el empate a cero continuó en el electrónico del Vicente Calderón. Le costó mucho al cuadro de Mel hacerse con el balón en el centro del campo, lo cual significó que los delanteros apenas tocaron el balón y que el Atlético de Madrid se acercó una y otra vez al área de Casto. Cierto es que el peligro de los locales casi acabó con las dos ocasiones iniciales de Falcao, pero la sensación durante toda la primera mitad fue que si el gol debía llegar sería por parte local.



Todo cambió tras el descanso. La intensidad bajó bastante, lo que le sirvió al Betis para no estar tan perdido en el centro del campo. Y pronto le dio resultado, porque Pozuelo tardó apenas diez minutos en poner por delante al conjunto verdiblanco. El canterano aprovechó un rechace y un resbalón de un defensa colchonero para estrenarse como goleador bético. Y cuando todo parecía que se ponía de cara para el Betis, el equipo dio un paso atrás y dio vida al Atlético de Madrid que, encima, se encontró con la expulsión por doble amarilla del canterano bético. El partido se convirtió en un auténtico asedio a la portería de Casto, que fue el gran protagonista de la segunda mitad con varias paradas de mérito. Aun así, la mejor noticia para los de Heliópolis fue que los minutos siguieron pasando y el cuadro colchonero no era capaz de empatar. No sólo eso, sino que en la recta final Jefferson Montero pudo hacer el segundo, cosa que sí hizo Roque Santa Cruz en los minutos de infarto para el Betis, en el descuento.